En este capítulo utilizamos textos de Guillermina Guridy (ética profesional) y Martha Castillo (psicología de la belleza), quienes explican de manera clara los aspectos esenciales que los alumnos deben conocer en su formación profesional.
Ética profesional
La ética profesional es un conjunto de normas y valores que mejoran el desarrollo de las actividades relacionadas con cualquier profesión. Estas normas determinan cómo se debe actuar en determinadas situaciones y se basan en valores universales como respeto, honestidad, justicia y responsabilidad.
En el ámbito de la belleza, la ética garantiza equilibrio y balance tanto a nivel personal como profesional. Aplicarla refleja excelencia y prestigio, demostrando que la profesión no solo depende de lo tangible, sino también de principios que elevan la calidad del servicio.
- Respeto
- Honestidad
- Justicia
- Responsabilidad
Psicología de la Belleza
La psicología estudia la conducta humana y sus reacciones frente a estímulos. La belleza, como concepto subjetivo, se relaciona con nuestra percepción de la vida. Unir estos enfoques permite comprender cómo interactuar con los clientes de manera efectiva.
La Psicología de la Belleza se entiende como el arte de relacionarnos con nuestros clientes. A través del contacto directo, intercambiamos experiencias y construimos confianza, llegando a ser incluso consejeros o amigos.
Nuestra misión va más allá de embellecer externamente: la clave es saber escuchar. Escuchar intencionalmente permite identificar qué motiva al cliente, sus gustos, necesidades y hasta señales de que algo en su vida está afectando su actitud.
Ejemplos comunes incluyen clientes que piden cambios drásticos que no coinciden con su estilo de vida, o que se muestran más callados o conversadores de lo habitual. En estos casos, el estilista debe pausar y mostrar interés genuino por entender qué les sucede.
Conclusión
Tanto la ética como la psicología de la belleza son pilares en el trabajo del estilista. La primera establece valores que elevan la profesión, mientras que la segunda fortalece la relación con los clientes a través de la comunicación y la escucha activa.

